El suelo de la finca

La finca se sitúa sobre un arenal de interior. La arena que predomina da al suelo unas condiciones de permeabilidad muy altas. La retención del agua es muy baja, casi nula, así como la de nutrientes.

Se trata de un suelo donde es difícil implantar diversos cultivos, donde las plantas van a encontrarse con dificultades para crecer o mantenerse. Existen especies adaptadas a este tipo de suelos conocidas como psamofilas.

Debido a la estructura de la arena, este tipo de suelo es muy fácilmente erosionable, tanto por la lluvia como por el viento. Una manera de reducir este impacto es mantenerlo siempre cubierto por vegetación. Estas plantas reducen la erosión mediante tres vías. La primera es al reducir con sus hojas y ramas el impacto de las gotas de lluvia o el viento contra el suelo. El segundo es con sus raíces que forman un entramado que sujeta físicamente las partículas del suelo. El tercero es mediante la acumulación de materia orgánica de sus partes muertas, hojas caídas, etc. dicha materia orgánica forma agregados con las partículas minerales del suelo dándole una estructura mas compleja y definida.

El acolchado o mulching aporta sombra al suelo, conservando por mas tiempo la humedad en el mismo y favoreciendo la implantación de las plantas. Este sistema lo utilizo en en el huerto y los árboles frutales. Para los acolchados utilizo especies del propio terreno como el Piptatherum miliaceum, la Cortaderia selloana o restos de podas de los árboles.